Ya que estamos a la mitad de cuaresma...

Bien… ¿Cómo va tu cuaresma? ¿Aún estás despertándote temprano para ejercitarte e ir a misa? ¿Aún estás haciendo el esfuerzo de ser amable con esa persona molesta para ti? ¿Todavía tienes el firme propósito de no comer chocolate, o has encontrado maneras creativas de saltártelo?

Es normal que después de comenzar algo como la cuaresma te sientas tentado a rendirte en el esfuerzo. Es parte de esta inclinación humana que tenemos hacía la comodidad y el pecado. “Claro, ya has hecho más que suficiente, ¿por qué no premiar todo el bien que has hecho?”. “Solo por esta vez… ¡Mañana saltarás como un lince fuera de la cama, a la primera!”. Sí, claro, claro…

Es muy importante practicar esa pequeña virtud llamada perseverancia o fidelidad. Nunca había escuchado hablar tanto de fidelidad hasta que empecé a tomar mi vida espiritual en serio. ¡Y es tan importante...! ¿Quién ha sido canonizado por hacer una cosa buena una vez en su vida? Si estás pensando en San Maximiliano Kolbe, su “cosa buena” nació como consecuencia de muchos buenos actos escondidos durante toda su vida, actos heroicos de virtud a diario.

¿Piensas que aprobarás tu examen por estudiar un par de minutos? ¿O que podrás ganar un campeonato por practicar con tu equipo una o dos veces? ¿Crees que coger la guitarra de vez en cuando, cuando te apetece, hará que aprendas a tocarla bien?

Una vez más, nuestra vida diaria sirve de ejemplo para nuestra vida espiritual. Dios quiere vernos con un deseo permanente de servirle, no solo cuando nos apetece. ¡Disciplina! Disciplínate y trata de tener personas que puedan pedirte cuentas de lo que haces.

¡Mortificación! Muerte a ti mismo. ¡Es un largo proceso de cortar con el amor propio! Pero es muy necesario.
¡Continúa, persevera! Si nada te ayuda a hacer oración, busca una buena meditación de la Pasión de Cristo. Cuaresma es un tiempo para reflexionar en lo que Él ha hecho por nosotros y para pedir la gracia de poder imitarle de la manera que Él quiera.

Esta cuaresma todavía podría ser la que marque tu vida, no dejes que el enemigo y tu pereza te detengan.